El lenguaje publicado, esto es el lenguaje presentado por los medios de comunicación, incluidos los avisos, se está poblando en la Argentina de una cantidad de palabras erroneamente usadas, pobres, generalmente innecesarias, que terminan por incorporarse al discurso cotidiano hasta convertirnos en una sociedad de mal hablados.
Las anteriormente inexistentes carreras de “comunicación” o “edición” producen anualmente centenares de egresados que, debemos suponer, son los que luego se encargan de redactar y corregir esos textos. Basta echar un vistazo a los diarios, prestar atención a los mensajes publicitarios, leer las etiquetas para ver los deplorables resultados.
En este fenómeno van de la mano desde la incompetencia profesional hasta la tilinguería, sin desconocer los esfuerzos de mercachifles, charlatanes y buhoneros que deliberadamente retuercen el lenguaje en su permanente esfuerzo por embaucar al auditorio. A continuación, una lista de las palabrejas que más irritantes me resultan. Usted puede agregar las suyas. Continuar leyendo “Mal hablados”