partir del último cuarto del siglo pasado, el Estado argentino fue cayendo paulatinamente en manos de una mafia, que hoy lo maneja y aprovecha su poder coercitivo para robarse el patrimonio público y esquilmar a los ciudadanos del fruto de su trabajo. Esto, más que cualquier otra cosa, explica la decadencia de la nación y el empobrecimiento de su gente; explica la caída de una sociedad otrora orgullosa, educada, saludable, creativa, igualitaria e inclusiva a los niveles inferiores de... Continúa →
Tattaglias y Corleones
Si la Argentina quiere revertir su decadencia debe eludir la polarización electoral entre las familias mafiosas que se adueñaron del Estado