“Poniendo atención a la pasada campaña electoral, hemos escuchado propuestas vagas, repetidas en su versión más simplificada, nunca debatidas y mucho menos sometidas a comparación de un modo crítico, con datos y referencias valederas. Se trata de ‘no ideas’, frases recurrentes (y a veces ocurrentes) decoradas con imágenes de contenido emocional, pero que paradójicamente ya no emocionan. (…) Las ‘no ideas’ tienen el atractivo de la ambigüedad y la... Continúa →
Etiqueta: Elecciones 2013
El votante medio
“El votante medio no se apartó mucho de la tierra conocida. Se limitó a repartir un poco más el poder dentro de sus fronteras. En términos políticos, se mantuvo en las proximidades de la presidenta, premiando a un hijo descarriado, no a un miembro de otra familia. En términos económicos, tampoco fue más allá de los logros del lúcido Lavagna y del primer Kirchner: crecimiento del producto con baja inflación. En estos años prósperos, el votante medio se acostumbró al casi... Continúa →
Contra la corrupción
La corrupción es el principal problema de la Argentina, el que está detrás de todos los demás problemas que la afectan en este momento de su historia: desde la inseguridad hasta la inflación, desde el narcotráfico hasta la trata, desde la pobreza extendida hasta el agobio impositivo, desde la falta de energía hasta el deterioro o ausencia de infraestructura. Por su compromiso en la lucha contra la corrupción, Gaucho Malo respalda a estos candidatos para las elecciones del domingo en... Continúa →
Solita y Scioli
Sobre este punto no hay opiniones discordantes: la encuesta de agosto despertó al kirchnerismo del ensueño de una Cristina eterna. Esto lo han visto con claridad los opositores, lo han visto los peronistas que mantenían una cautelosa fidelidad, incluso lo han visto los propios kirchneristas. Que también han visto que cualquier idea de continuidad en el tiempo para lo que ellos –y solamente ellos– reconocen como su proyecto se llama Daniel Scioli. Se necesitó el sopapo de las... Continúa →
Corporativa y autista
Al reaparecer en público tres días después de su pésimo desempeño en la encuesta compulsiva del domingo, la presidente Cristina Kirchner emitió un encendido mensaje de tono marcadamente corporativo, en el que desestimó a sus opositores como títeres de grandes intereses económicos que conspiran contra su gobierno. Sólo con esos grandes intereses, dijo, eventualmente estaría dispuesta a dialogar.
En un discurso pronunciado en Tecnópolis, el escenario mayor de las fantasías kirchneristas, la presidente no acusó recibo del castigo sufrido en las urnas. Por el contrario, aparte de revelar que el FPV ganó en la Antártida (dato maliciosamente ocultado por la prensa, según afirmó), Cristina ratificó el discurso autista que ha caracterizado toda su gestión, y descalificó como mentirosa cualquier interpretación de la realidad distinta de la suya. “Además de que en la vida hay que elegir, en la política no hay que mentir más”, reclamó.
Para la presidente, el matizado conjunto de fuerzas opositoras que se impusieron en la encuesta del domingo no son más que la expresión de una impostura, una representación, lo contrario del oficialismo que encabeza: “No mentimos, no nos disfrazamos. Solamente la fortaleza de la verdad y de la realidad que, por más que hagan lo que hagan, no se puede ocultar”, dijo. En consecuencia, sólo se trata de salir a la calle y anunciar con nuevos bríos la buena nueva kirchnerista, machacar en el relato. “Por más titulares que quieren confundir, vamos a seguir adelante. Tengamos la fuerza de cada militante para ir casa por casa explicando esto. Si hay errores, los discutiremos”, prometió.