En los Estados Unidos, Washington DC es una metáfora de la clase política, y cualquier aficionado al cine conoce la imagen de Washington DC que Hollywood proyecta en sus películas: una banda de corruptos desentendidos de sus votantes, que sólo se acuerdan de la Constitución y de la patria a la hora de componer discursos, siempre dispuestos a usar y abusar de sus posiciones de poder para engrosar sus billeteras. Hollywood muestra lo que el público norteamericano piensa de la clase... Continúa →
La profesión política
El manejo de la cosa pública se convirtió en patrimonio de una casta que pone al servicio de las élites el poder coercitivo del Estado