En los años posteriores a la segunda guerra europea el mundo se organizó en un sistema bipolar cuyos núcleos eran los Estados Unidos y la Unión Soviética. El resto de las naciones se acomodaba dentro de la esfera de influencia cada uno de esos polos, fuese por proximidad geográfica, por cercanía ideológica o por comunidad de intereses. Las Naciones Unidas, y en especial su Consejo de Seguridad, constituían el reñidero donde las grandes potencias dirimían sus conflictos mayores,... Continúa →
Polaridades
El orden bipolar de la posguerra cayó junto con el muro, y la ambición globalista parece encontrar tropiezos