«El pueblo no quiere saber de qué se trata. Querrá comer, disfrutar, la fiesta, lo que quiera pero saber no quiere. Así que no esclarezcas, no ilumines, porque no hay receptividad. La ignorancia es algo muy sutil, no es simplemente una ausencia de conocimiento. La ignorancia puede ser una voluntad de no saber.» —Tomás Abraham, pensador argentino, en declaraciones al sitio Infobae publicadas el 2 de julio de 2023.
Coincido con Claudio Pierri.
abel posadas
Generalizar con la palabra “pueblo” no conduce a conclusiones certeras. Es meter a todos en la misma bolsa y no todos piensan igual.
Me parece una ligereza de un pensador esgrimir esas frases y conceptos. Será que espero mas de personas calificadas como tal.
Muchos queremos saber de que se trata ocupándonos de informarnos con los recursos que disponemos. Seguro tendremos opiniones con cierto sesgo pero eso no se puede calificar de ignorancia.
La dirigencia política sí tiene una responsabilidad ética y moral por lo que dice y hace.
Pero la hipocresía invade su dignidad transformando sus actos en hechos corruptos, por incapacidad o intereses oscuros, sin importarles las consecuencias que provocan y sabiendo que muy difícilmente serán juzgados y menos aun condenados por ello.
La ignorancia como voluntad de no querer saber se puede aplicar a aquellos que viven -en el decir de Juvenal- de “pan y circo” (las tres acciones necesarias e irrenunciables: c…r, c…r, c…r, más el circo=fiesta), conductas típicas de las masas subyugadas por gobiernos populistas y corruptos, a través de dádivas generosas que van en desmedro del crecimiento de la economía formal, el trabajo digno, la educación adecuada, la salud, la seguridad pública y privada, y un largo etc.
Un número importante de ciudadanos de nuestro país viven en esa condición, desconociendo la propia dignidad, la que venden por unos cuantos pesos, sobre todo en tiempos electorales, para que no se termine el “pan y circo”.
Tiene razón T. Abraham al decir que la ignorancia es más que ausencia de conocimiento. Puede llegar a convertirse en un estado mental anestesiado, por el que al individuo sólo le importa sobrevivir, no importándole cual sea el costo. Es la denigración de la condición humana. ¿Cómo se vuelve de esa situación, cuando es generalizada?
Me suena como una especie de discriminación intelectual, entiendo que se refiere a Argentina,y no coincido en lo absoluto, hay generaciones enteras en las que sus integrantes se destacan como profesionales, como técnicos, como agricultores, y hasta como estudiantes, no solo localmente sino en todo el mundo.
Entiendo que es gente que SI QUISO SABER, ahora si la opinión del artículo se refiere a la política, como se ha manifestado en los últimos artículos de Santiago, el abuso al que hemos sido sometidos por la clase política hasta el día de hoy y con presunción de varios años por delante es tal , que sí es verdad no interesa saber, lo que en realidad ya sabemos y no podemos solucionar o no sabemos, si se aplica perfectamente el concepto del SR ABRAHAM a los políticos , los cuales es evidente que no quieren saber ni salir de su zona de confort.la opinión del SR Fuente es un facilismo que tampoco admito, supongo que será extranjero , porque habla en tercera persona.
Santiago esta es una de las páginas que permite saber y conocer con amplitud los conceptos generales, que son los más importantes, que el chusmerío reinante, gracias.
Cruda radiografía del ciudadano medio argentino. Cuando se le pone la verdad ante sus narices suele o bien negarla, o bien acomodarla a sus propios argumentos. Una suerte de síndrome de Estocolmo ampliado.