Hacia mediados de la década de 1960, en momentos en que arreciaba la guerra fría, muchas personas temían en los Estados Unidos que, mientras la estructura de defensa de la nación mantenía la puerta bien cerrada, el socialismo se les colara por la ventana. A modo de guía práctica para la detección rápida de cualquier amenaza Warren Carroll, un historiador católico, y Michael Djordjevich, un serbio que había escapado de la Yugoslavia comunista de Tito, compilaron una lista de catorce señales indicadoras de políticas socializantes. Las denominaron Catorce hitos hacia la esclavitud, y advirtieron que la enumeración no seguía ningún orden en particular. No se trataba de una escalera hacia el socialismo sino una lista de señales: la aparición de cualquiera de ellas debía despertar la alarma, y la coincidencia de por lo menos cinco era clara advertencia de que todo el resto iba a seguirle más tarde o más temprano. La reproducimos por considerar que puede ser útil en este momento al lector argentino como guía para evaluar el estado de las libertades civiles en el país.
Catorce hitos hacia la esclavitud
1. Restricciones al retiro de dinero del país y a la apertura o mantenimiento de una cuenta bancaria en el exterior.
2. Abolición de la propiedad privada de armas de fuego.
3. Detención de individuos sin proceso judicial
4. Requisito de que transacciones financieras privadas sean vinculadas a números de identificación gubernamentales, de modo tal que el gobierno pueda llevar registros informáticos de esa transacciones.
5. Leyes de educación compulsivas que prohíban la asistencia a escuelas privadas existentes.
6. Servicio no militar obligatorio.
7. Tratamiento psicológico obligatorio para trabajadores no estatales o alumnos de escuelas públicas.
8. Declaración oficial de que las organizaciones anticomunistas son subversivas y acciones legales posteriores encaminadas a suprimirlas.
9. Leyes que limiten el número de personas que pueden reunirse en un domicilio particular.
10. Cualquier cambio significativo en las normas de emisión de pasaportes que haga más difícil su obtención o su uso.
11. Controles de precios y salarios, especialmente cuando el país no está en guerra.
12. Cualquier clase de registro gubernamental obligatorio acerca del lugar donde trabajan las personas.
13. Cualquier intento de restringir la libertad de movimientos dentro del país.
14. Cualquier intento de sancionar una ley importante por decreto del ejecutivo.
Quienes conozcan de cerca la sociedad estadounidense advertirán enseguida cuán atinadas habían sido las advertencias de Carroll y Djordjevitch, y en qué medida esa sociedad –otrora tan celosa de sus libertades– ha ido perdiendo muchas de ellas casi sin darse cuenta, a veces cediendo a la demagogia de un supuesto estado de bienestar, a veces cediendo al miedo provocado, como ha sido el caso de las regulaciones financieras para frenar el lavado de dinero, o la suspensión de garantías individuales para frenar la amenaza terrorista (Ley Patriótica).
–S.G.