Los hechos, según aparecen narrados en la prensa, son más o menos así: siguiendo el rastro de unas piezas de arte robadas, la policía llegó hasta una vivienda particular en la localidad de Beccar, en las afueras de Buenos Aires. La vivienda pertenece a una persona no identificada, descripta como coleccionista o anticuario. Con una orden provista por la jueza Sandra Arroyo Salgado, la viuda del fiscal Alberto Nisman, la policía allanó la casa, encontró efectivamente una cantidad de... Continúa →
El extraño caso de los objetos nazis
El predicamento de un coleccionista privado plantea interrogantes sobre las libertades individuales y el manejo responsable de la cosa pública