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29 opiniones en “¿Lego o Rasti?”

  1. ¡Hola!

    Permítanme una nada breve introducción sobre mi relación con los juegos de encastre como para dar un contexto. Jamás toqué un Rasti, nací a fines de los ’80 y solo los conocí por referencias familiares hasta que en 2007 reaparecieron. La primera marca con la que tuve contacto fue Mis Ladrillos, que en ese momento tenía pocos ‘sets’ de piezas genéricas sin gran variedad. Como niño disfruté creando mis propios modelos hasta que una de las limitaciones propias de la marca me llevaron a pedirle a mis padres sets de otra disponible a principios de los ’90. La limitación era la poca cantidad de piezas diagonales (cuñas) con las que constuir techos y la alternativa fue Plastiblock (actual Blocky y de la firma que rescató a Rasti, Dimare) por sus sets con grandes cantidades de esas piezas. Otra ventaja de la misma (para mis intenciones creativas) eran sus ruedas más chicas y puertas de vehículos, así como piezas planas sin ‘studs’ (botones) tipo “baldosas”, características obviamente copiadas de LEGO. Construí los sets (taxi, patrullero, grua de auxilio, ambulancia, autobomba, micro, hospital y cuartel de bomberos) siguiendo las instrucciones primero y rápidamente pasé a inventar mis propias creaciones (casas, aviones, helicópteros, trenes y barcos). Me divertí mucho pero cuando quise otros sets (camión con acoplado, coches de carreras, cuartel de policía y cajas de piezas genéricas para armar casas) la marca desapareció dejando atrás solo algunos sets (de los que ya tenía) disponibles en las jugueterías. Mis padres me compraron algunos repetidos para obtener más piezas (un segundo cuartel de bomberos, dos patrulleros, otro micro y otra camioneta del ACA) y continué creando cosas con lo que tenía. Mi creatividad me hizo perder una gran cantidad de piezas: Armé una linterna mágica alrededor de una lamparita de velador, sin saber (por la edad y por hacerlo en ausencia de mis padres) que el calor radiativo derretiría el plástico. Eso fue en 1994 y sumado a la llegada a mi vida de un juguete (tren eléctrico) más valioso, desde lo material y lo afectivo, representó mi primer periodo de alejamiento de los juegos de encastre.

    Pero el distanciamiento duró poco ya que en 1998, aumento del poder adquisitivo familiar y disponibilidad de ofertas mediante, obtuve mi primer set LEGO. Ya conocía la marca desde 1993 pero siempre había sido lejana. A partir de ahí y hasta el 2000 obtuve unos cuantos sets pequeños (rodados y vehículos aéreos) y un solo set grande (avión y transbordador espacial), todos pertenecientes a los catálogos del periodo 1995-1997. Pero antes de la crisis y el fin de la convertibilidad tuve dos motivos que me llevaron a no querer más de la firma danesa: Lo que de grande me enteré que denominaron ‘juniorization’ (a partir de 1997 pero que a la Argentina llegó dos años después) y los sets de Star Wars (a partir de 1999 por el estreno de la primera precuela). Al ser más grandecito (ya había superado mi primera década) estas dos nuevas líneas de LEGO me parecían tontas y poco inspiradoras por lo que dejé de llorarles a mis padres (ellos felices, je je) por los productos de tan costosa marca. Los últimos tres sets que les pedí, de los cuales recibí dos (autos) porque el tercero (avión) no se conseguía en el país, fueron de la rama Technic. Y lamentablemente ya eran de la línea atontada (Tech Play) con pocas piezas y baj funcionalidad. Mi madre al ver los ladrillos con orificios y los ‘lift arms’ (piezas tipo Mecano) siempre recordaba los Rasti de su primo y sus ingeniosas creaciones mecánicas. Recientemente descubrí de que nuestro Rasti fue pionero en ese nicho con su Técnico (1969-1973) y los daneses vinieron después con su Technic (1977 en adelante). ¡Incluso ciertas piezas de Rasti recién estuvieron disponibles en LEGO dos décadas más tarde! Desde el comienzo del milenio jamás volví a obtener algo de la famosa marca aunque nunca perdí el interés, seguí jugando con lo que tenía y manteniendo la esperanza de poder obtener algún balde de Freestyle (luego caja de Classic) para poder construir casas y estructuras más sólidas. Pero ya siendo adulto ocurrió algo similar: Con mis ingresos podía acceder a algun que otro set de las nuevas líneas City o Creator pero ninguno me atraía por la baja cantidad total de piezas, la excesiva presencia de partes específicas para los vehículos (más propias de Playmobil), algunos colores surreales y la poca compatibilidad resultante con los sets que ya tenía. Decidí usar entonces mis ingresos en otros hobbies tales como los trenes eléctricos o los simuladores para computadora (aeronáuticos y ferroviarios). Nunca volví a obtener algo de LEGO hasta que pude comprar un set Technic usado de 1991 que siempre había querido por su gran cantidad de piezas estructurales y mecánicas y su motivo aeronáutico…

    Llendo al grano y después de haber leido todos los comentarios opino que casi todos tienen una parte de razón. No puedo opinar sobre la jugabilidad y calidad del Rasti ni pasado ni actual pero si concordar en la cuestión conceptual que plantea el autor sobre las filosofías opuestas de juego. Creo que la gracia de los juegos de encastre radica en la capacidad alusiva de los mismos ya que para pasatiempos imitativos existen otros más cercanos a las ciencias duras y/o a las artes plásticas (tales como el ferromodelismo, aeromodelismo, automodelismo o modelismo naval) con metodologías constructivas más complejas. Personalmente considero que un conjunto de ladrillitos plásticos debería ser lo suficientemente sencillo como para inspirar representaciones de sujetos y objetos reales o imaginarios en un grado de realismo de medio a bajo manteniendo la flexibilidad que permite desarrollar la creatividad. Un mayor realismo se puede dejar para las creaciones de adultos con piezas más avanzadas o bien con otros pasatiempos, como ya dije. Sin embargo, me gustaría hacer una crítica a los artículos (el inicial y esta contestación) en cuanto a la falta de aclaración del marco temporal utilizado para hacer la comparación. ¿Por qué? Porque la comparación es un poco odiosa si no se tiene en cuenta que la filosofía detrás del Rasti se mantuvo invariable con el tiempo mientras que la de LEGO cambió (para mal) varias veces desde los ’70 hasta la actualidad. De hecho, la filosofía de la marca danesa era la misma que la de la germano-argentina durante el periodo de co-existencia entre ambas. Busquen imágenes de los sets anteriores a 1965 y verán que eran muy primitivos y por lo tanto más flexibles por la ausencia de piezas específicas. Entre 1965 y 1975 hubo una simultaneidad entre sets más básicos y otros más complejos, permitiendo una complementación entre ambas filosofías que personalmente encuentro muy interesante y entretenida. De 1975 a 1995 se da un periodo que algunos fanáticos consideran como la Era Dorada (aunque concuerdo con la valoración positiva de ese periodo veo la denominación un poco exagerada) debido a la gran cantidad de temas y sub-temas disponibles (trenes, barcos falsos, barcos flotantes, espacio, medieval, piratas, técnico, entre otros) usando nuevas piezas específicas pero siempre manteniendo la modularidad y flexibilidad original. De 1995 en adelante comenzó la transformación filosófica a partir de la introducción de líneas oportunistas (licencias de Star Wars, Indiana Jones, Harry Potter y más recientemente Marvel) o muy fantasiosas (Technic Competition, Bionicle y Ninjago).

    Les pongo un ejemplo personal: El set LEGO 6639 (un ‘dragster’ bien norteamericano) de 1995 tiene unas cuantas piezas específicas que permiten construir otros cuatro modelos alternativos (otro dragster, un tractor de carreras, una topadora y una lancha) muy sencillos. Sin embargo, de chico utilizaba las piezas para hacer un avión liviano a reacción bastante convincente y una moto de nieve. Es decir, aun existía cierta flexibilidad aunque no tanta como tres décadas antes (para construir casas se necesitaban sets genéricos aparte, por ejemplo). Luego vienieron otros sets tan pero tan sencillos que las pocas piezas raras que traían impedían armar otra cosa que el modelo en sí y quizás otro alternativo. Ahí es donde la marca danesa deja de producir un juego que apela a la creativida alusiva, al menos desde los sets más comercializados. Digo esto porque en realidad nunca dejó de producir las piezas tradicionales en grandes cantidades, pero para acceder a ellas se volvió necesario adquirir baldes o cajas con un precio elevado por ser ‘especiales’ para niños crecidos o adultos. También mantuvieron sus sets educativos (bajo la otrora línea Dacta) pero solo disponibles en Dinamarca y países vecinos (Alemania, Bélgica, Holanda, Noruega, Polonia y Suecia). También debo aclarar (como lo hizo alguien más arriba) que hay una gran escena internacional de modelismo basado en piezas LEGO por parte de AFOLs (fanáticos adultos de la marca) que arman bellísimas recreaciones, muchas veces con gran funcionalidad (mezclando piezas System con Technic). Pero ese es un mundo muy alejado de nostros ya que se trata de personas con acceso a la comercialización de piezas sueltas (en Dinamarca y Alemania hay como unos “todo suelto” donde se pueden comprar por peso) o sets customizados (se diseña en la computadora y se envía la lista de partes a LEGO para que las envíe en una caja por correo). En resumen, para los chicos de aquí y ahora personalmente no les recomendaría a los padres comprarles sets de esta marca si no están seguros de poder seguir adquiriendo otros más caros cuando a los hijos les “pique el bichito”. Incluso teniendo un elevado poder adquisitivo a veces se dificulta o se vuelve imposible hacerse traer de Europa lo que uno quiere (por las crónicas trabas gubernamentales). Si es cierto que los Rasti actuales son de baja calidad (conozco personas que tienen los de los ’70 en perfecto estado y totalmente utilizables), recomendaría Mis Ladrillos que está en una suerte de fase híbrida entre la variedad del LEGO de los ’70 y la funcionalidad de los ’90 (aunque con capacidad de programación de esta década). Han estado agregando piezas y colores pero sin exagerar y mantienen un enfoque didáctico muy respetable. La calidad me dijeron que es la mejor dentro de lo que se puede conseguir dentro de la industria nacional.

    Para finalizar, quería hacer mención a una marca que nació copiando las medidas de las piezas danesas pero introdujo cambios que la volvieron dueña del sistema de encastre más avanzado y flexible de todos, la española TENTE. Fue famosa por su gran cantidad de sets dedicados a la industria ibérica más importante de aquellos tiempos, la naval…

    ¡Saludos y perdón por el ‘wall of text’ que me salió!

  2. A mis hijos le gusta más lego (tienen algunos originales y muchos de imitación)… Se la pasan armando e imaginando.
    Creo que también fueron motivados por las películas Lego Jurassic World , Star Wars, City o Lego princesas.

  3. Buscando las diferencias entre diferentes marcas para comprar llegué a esta excelente nota, muy buen punto!!!!! (De chica jugaba con unos ladrillos q no se de q marca son pero los tengo hasta hoy).

  4. Leyendo todo lo que se ha expuesto y opinado, me viene a la mente cual era mi forma de jugar con el rasti… creo que lo puedo definir como un juego para crear juegos, ya sea desde la pura imaginación de un escenario o la imitación pero a su vez creación de nuevos roles dentro de una historia… lo que quiero decir es que nunca después del rasti vi o supe de un juego tan creativo y sin límites a pesar de no poder refinar las formas… ej.: cuando veía serias por tv los sábados, una vez que terminaban corría a crear las naves, caballos, puentes… etc. etc. que había visto y generaba un juego basado en eso pero a la vez con elementos surgidos de mi imaginación… … … sin duda el rasti es como juego didáctico y educativo el más importante de los dos; Lo que si le reconozco al lego es el nivel de detalles y la calidad del producto… pero no lo elijo.

    1. Estoy de acuerdo, me pasa todo lo mismo, pero con Mis Ladrillos. La calidad es muy superior (muy) a la de Rasti y los precios son similares (no estoy comparando con Lego). De hecho, no entiendo cómo en la publicación ni siquiera mencionan la marca. Yo jugaba cuando era chico y ahora le compro a mis dos hijos que también les encanta. De verdad, si nunca comprobaron, venalo. A uno de mis nenes le regalaron un Rasti para el cumple y no podíamos creer cuánto peor son los encastres y la calidad en general. De cualquier forma, hagamos que los chicos jueguen más con juguetes (sobre todo de este tipo) y menos con celulares/tablets.

      1. Estimado Nicolás, por aquí conocemos Mis Ladrillos desde su primera encarnación, con piezas de goma, concebido especialmente para la construcción de pequeñas casitas… La nota comenta una comparación hecha por otro articulista entre Lego y Rasti, y por eso se limita a esas marcas. En su versión actual, Mis Ladrillos me parece más cerca de la filosofía de Lego que de la de Rasti, más allá de la calidad de las piezas y los encastres que usted señala.

  5. Tengo 27 años y desde chico disfruté de los juegos de encastre. Pase gran parte de mi infancia armando autos y camiones, barcos, helicopteros y casas con los mis ladrillos. Jamas había escuchado hablar de rasti, y los legos estaban fuera del alcance del bolsillo. Hoy soy un fanatico de rasti, aunque poseo algun que otro lego. Mi elección tiene su fundamento: con rasti utilizando un par de piezas basicas armas lo que se te ocurra, el limite es la imaginación, podes hacer un modelo tan real como quieras. Por otro lado lego tiene tanta variedad de piezas que termina confundiendo. En lego, no resulta tan fácil utilizar una pieza de un set, y construir cualquier otra cosa con esa misma pieza: por ejemplo, el lego trae techos de casas que estan armados y solamente va encastrado, tiene un tamaño que es el de la casa que trae el set. Es decir, si quiero armar otra casa, tiene que tener el tamaño adecuado y la forma, para poder usar el techo. En rasti, armo el techo con la forma y tamaño que se cante. Los legos traen inodoros, mesas, faroles, cabinas de autos chasis con los ejes para autos…que ya estan armados y solo se requiere encastrarlos. En rasti, uno arma el inodoro, la mesa, se las ingenia para construir un farol. Un ejemplo que demuestra esto es el sgte. : Si te compras una caja de lego para armar supongamos un auto, solo podes armar ese auto, o a lo sumo alguna variante minima de ese modelo. El ancho del auto y el tamaño, queda limitado porque el chasis trae los ejes ya fijados donde van las ruedas. No podes variar el ancho, como si ocurre con rasti, donde cada eje es independiente y podes hacerlo tan ancho, alto o largo, como se te ocurra. El tema de la calidad del producto es obvio: los rasti son nacionales, no podemos pedir la calidad del lego (que es carisimo). A modo de resumen, el lego copia modelos reales, una caja que trae para armar una ferrari va a ser siempre una ferrari. De hecho poseo una caja de un porsche donde el vidrio y todo el techo del auto es una unica pieza…que otra cosa vas a armar con eso? un auto nomas…El rasti invita a crear, por eso los prefiero. Saludos

  6. El asunto reside en qué es lo se quiere estimular: si la imaginación, que es fluida, espontanea y multidireccional, o la imitación de ciertas cosas y/o personajes por la vía de la observación de reglas. Si las piezas son muy específicas tenemos el equivalente de un ADN, el plano para reproducir una forma (objeto, organismo o personaje), equivalente a un rompecabezas. El mecano traía modelos y cantidad de piezas (pocas o muchas), pero chicos y grandes, una vez que habían realizado modelos, se volcaban a hacer variaciones formales y cosas que no estaban en el manual.
    (La mayor parte de las obras de arte son variaciones formales a partir de unos pocos modelos).
    El Combiplano era híperespecífico: un error conducía al fracaso y al desastre; estimulaba la observación y la observancia de reglas fijas, que es algo diferente de la creatividad.

    1. yo arme los dos de chico y hasta armo ahora con lego technic ,hoy fui a comprarle unos ladrillos a mi nena para que arranque con unos de su edad y estaba entre lego duplo 5 millones de dolares 18 ladrillos y la serie de Rasti de toy story mucho mas barato .compre los de toy story (dos cajas) y al los 5 minutos ya m arrepenti ,no se si rasti simpre fue una mierda o bajo la calidad pero no sirven. o no los podés encastrar ,o se sueltan facil ,y se arruinan al toque y el plastico es de muyyy muy mala calidad … en fin lo barato sale caro … esta semana le pido los lego aunque sea en cuotas pero son para toda la vida …

  7. ¡Qué interesante! No había visto este diálogo.
    Hago mi contribución.
    Los dos juegos están basados en una posición ingenua.
    Rasti se basa en la ingenuidad del niño (y del adulto que conserva intacto al niño que fue) que tiende a inventar e improvisar – “crear” sería, con ciertas reservas, la palabra adecuada – con unos módulos semejantes pero diferentes Ready Made (ya hechos y al alcance de la mano), tales como ramas y piedras, cosas varias y fragmentos de cosas, una apoyatura para su fértil imaginación y su necesidad de comunicar y compartir. Esta ingenuidad es universal, viene del fondo de los tiempos, está relacionada con el arte (o el arte de los artistas está relacionado con ella) y se manifiesta siempre que se presente la ocasión. Salvo que un factor represivo se dispare desde afuera – o desde adentro – y frustre el impulso.
    Lego está basado en la ingenuidad de creer que “todos queremos lo mismo”: apropiarnos de las formas y figuras de ciertos objetos emblemáticos y de ciertos personajes ejemplares (los fetiches de la cultura en curso) y repetirlos.
    La ingenuidad en la que se basa Rasti en más profunda y universal, y hay que hacer lo necesario para que no desaparezca, tanto en la niñez cómo en el mundo adulto. La escuela pública ha sido (y sigue siendo en algunas instituciones) enemiga de esa tendencia. La fuerte tendencia a la estereotipia, característica de todas las culturas, también.
    La ingenuidad en la que se basa Lego no es universal en la medida en que se basa en relaciones “específicas”, muy ligadas al mundo adulto, y está impulsada intensamente y en todos los frentes por la cultura científico-tecnológica promovida (y promotora) por el capitalismo y su particular mitología.
    Creo que no son verdaderas opciones, no son equivalentes, no son comparables salvo para una mirada global y exterior porque, aparentemente, se trataría de lo mismo. Rasti representa una tendencia básica; Lego es “otra cosa” y porta, lógicamente, su propio núcleo de valores.
    El viejo y olvidado Mecano (deudor de la ingeniería del s. XIX), daba un poco para las dos cosas.

    1. Su comparación entre Lego y Rasti es muy rica, y da en el clavo en varios aspectos. Lo mismo que el recuerdo del Mecano, que veo más parecido a Rasti en el sentido de que era más alusivo que representativo. Recuerdo otro juguete inspirado en el Mecano, llamado Combiplano, cuyas piezas estaban diseñadas exclusivamente para armar con ellas las distintas partes del avión: alas, fuselajes, turbinas, etc. En este sentido era más parecido al Lego, y mucho menos interesante para mi gusto.

  8. Leo los comentarios y no dejo de asombrarme, que se tenga nostalgia por un juguete de la infancia lo entiendo perfectamente, pero ensalzar a los Rasti por lo limitado de su catalogo de piezas? y asegurar que despierta mas creatividad?.
    Para empezar podemos contar con las mismas piezas en ambas marcas; claro que Lego tendrá innumerables piezas mas, con lo cual, con cualquier set básico tendremos despierta la misma creatividad, afirmar que una proa de barco en lego es solo eso, demuestra que en la vida tuvieron legos en las manos! puede ser inumerables partes de cuanto engendro ensamblable se le ocurra a un niño por la variedad de maneras para ensamblar las multiples piezas. Basta con leer un poco y ver las creaciones de chicos y grandes en las ferias que se realizan a lo largo y ancho del planeta para verificar lo que digo. En cuanto a la complejidad y cantidad de piezas, existe también el factor edad, no todas las piezas son útiles para todas las edades (aunque los chicos siempre se las rebuscan) y eso hace que lego acompañe la niñez, la adolescencia y la adultez, lego no tiene edad. En cuanto a la calidad no me parece que no sea parte de una filosofía como se afirma en el articulo. A ver si puedo explicarlo; Lego se esmera por la calidad de sus productos porque considera que el sistema debe poder ser compatible entre todos los set, de todas las piezas, de cualquier año de fabricación y que deben las mismas ser durables por largas décadas, de hecho las piezas son perfectamente compatibles desde 1964! y su durabilidad supera los 30 años aun en casos de uso intensivo. Lego significa: “Jugar bien” y vaya que si esto es una gran filosofía!, por otra parte se condena lo “comercial” a partir de la creación de lineas como: Star Wars, El Hobbits, etc… representan lo que chicos, adolescentes y adultos quieren comprar, a sus heroes, a los vehiculos y personajes de sus peliculas favoritas… en fin no se cual es el argumento, y les dejo un dato mas: afirmar que esas lineas se crean con piezas especiales no es asi! el 95% de las piezas son comunes a la mayoria de los sets producidos desde hace decadas, chequeen las paginas BigData relacionadas a lego y obtendran toda la información estadística de la que hablo y que tirara por tierra las teorias que sostienen.
    Ya para este punto creerán que soy un fanático de Lego, y creanme que no es así, Lego es objeto de estudio y material de trabajo para universidades e ingenieros de todo el mundo y lamentablemente Rasti es solo una copia de las piezas Lego mas básicas, incluso tomaron de muchas de ellas las medidas originales que no supieron respetar en otras de creación propia y que contrario a lo que dicen en el articulo confunden a los niños con nociones de geométria que se ajustan por fuerza, torsión y deformación y no por proporción y encastre.
    Y la perlita final volviendo a la calidad; chequeen que clase de plastificantes utilizan en la confección de los Rasti actuales y verán que la calidad y las normas ISO internacionales son muy importantes.
    Saludos.

    1. Creo que no se podría haber articulado una mejor defensa de Lego. Sin embargo, la nota no se propone hacer una comparación entre dos marcas o calidades de juguetes, sino entre dos estilos de creación, que pueden aplicarse a juguetes pero también a otros ámbitos. Si se pudiera reducir su tesis central a una fórmula sería: a más realismo menor imaginación. Y siguiendo en el terreno lúdico, creo que una comparación entre los juegos pixelados de las computadoras de 8 bits y los de la X-Box o la Play-Station me llevaría a la misma conclusión. Que sería, como todas, opinable. Gracias por su comentario.

  9. Por mi parte, me crié con rasti, y fui un fanático de chico. Al dejar de existir conocí Lego, al principio tuve la errónea idea de lo que cuentan del número de piezas, hasta que me di cuenta de las distintas líneas de Lego, que había cajas de piezas específicas, o no. Y conocí un mundo de motores, electrónica, sensores, movimientos neumáticos con bombas de aire electrónicas, robótica, con piezas super universales, con una calidad inmejorable, y que no se deforma con el tiempo. Es cierto que hay líneas más para chicos, más bonitas en acabados, piezas más específicas y más grandes, pero no es Lego así, es según la línea.

    Luego reapareció Rasti, le di la oportunidad, me compré cuanta caja salía, ya que me había quedado pendiente de chico la asignatura, y aparte, pensando en que iba a tener precios de pieza mucho más económicos que en Lego…

    Bueno, me encontré con un producto desactualizado, gente haciendo plata vendiendo nostalgia, pero no era lo barato que debería ser en función de la mala matricería, cada tanda de piezas difería apenas en tamaño de otras que complicaban grandes estructuras, y una de las pocas cosas lindas que tenían, las baldosas, no les dieron importancia.

    Una pena, mi casa no es tan grande para tener todo, y tenía que elegir, y realmente teniendo las dos cosas, el rasti no lo usaba, ni lo dudé, vendí todo el rasti.

    No cuestiono que era un productazo, y que en algún momento llegarán a la calidad que era el rasti antiguo, y que desarrolla la imaginación.

    Pero por favor, no lo comparemos con un producto donde tienen una tolerancia nula en las medidas y directamente se reemplaza la matriz apenas cambia eso, que es líder mundial, que marcó una tendencia, que dura para toda la vida, que encastra perfecto sin necesidad de hacer fuerza con un click que para desarmarlo te la regalo, y si se necesita fortaleza, se le atraviesan verticales. Además hablan de la pieza más rara de rasti como una cosa de locos y lego la tiene de siempre… en fin, tampoco las mentiras.

    Y es cierto que tiene cantidades de piezas distintas, y colores, y mucho de marketing, pero se dan el lujo de tener líneas de pocas piezas para construir casas, líneas de pocas piezas para cosas móviles, y de inventar líneas con montones de piezas distintas para otros fines. Que no son obligatorias comprar, no generalicemos al producto.

    Gracias y saludos.

    exRasti.

    1. Muchas gracias por su muy bien argumentado comentario, que compara los dos sistemas desde una perspectiva diferente y perfectamente válida. La nota de este sitio, sin embargo, compara filosofías y no calidades (y mucho menos la calidad buena o mala que le imprime al producto su actual fabricante), y no debería ser entendida como una pieza promocional en favor de Rasti.

  10. Coincido con el autor del artículo en que los rastis son mejores y permiten el desarrollo de la creatividad y la resolución de problemas que van apareciendo en las construcciones, además permite que los chicos incorporen nociones básicas de arquitectura e ingeniería debido a las soluciones que le deben dar a las estructuras como ser: el armado de una buena base, el desarrollo de fuertes columnas, la traba de los bloques, los encuentros en esquinas de 2 paredes, etc.
    El problema de los legos es que son construcciones preconcebidas, prearmadas y con un montón de precisas instrucciones a seguir que no se pueden alterar o saltear, una vez terminado el modelo se pierde el entusiasmo por lo limitado del juguete en si.
    Con los rastis hoy se construye una nave, mañana un avión, pasado un edificio o un robot o cualquier otra cosa que se nos ocurra, las posibilidades son infinitas y es eso lo que estimula la imaginación y la creatividad de nuestros niños y también la nuestra, de chico fueron mis juguetes preferidos y es uno de los juegos que más comparto con mi hijo.

  11. Causalmente la ubicuidad y el nº limitado de las piezas Rasti hacen del juego una actividad interesante.
    Una proa de un barco Lego es eso, una proa. En Rasti, una proa se desarma y es un muñeco, un edificio, un camión, un animal (la limitante es la persona, no el juguete)
    Si queda mal terminado no importa, la imaginación se debe tomar el trabajo de verlo terminado. Para mí, cuando era un niño, una caja a la rastra de un piolín era el más hermoso de los camiones. Jugar es el ejercicio de la imaginación.
    Va mi voto para Rasti, aunque debemos reconocer que Lego fue el fundador de la idea y en sus principios fue un juego de bloques y no de pre-formas. Saludos.

    1. Es cierto lo que usted dice sobre los orígenes de Lego. Sus presentaciones básicas mantienen el carácter de juego de bloques, pero suelen ser las menos atractivas en las jugueterías. Gracias por visitar este sitio.

  12. Hace unos meses le pregunté a mi sobrina de tres años, qué había hecho durante el día, a lo que me respondió entusiasmada y con una sonrisa hermosa: Jugamos con Facu (hermano) a que unas rayas eran cocodrilos y los saltábamos para escaparnos!!!
    Los Lego están buenos, pero Rasti es para jugar en serio.

  13. Me presento: soy fundador de un grupo que une a los fans de Rasti, así que además de ser obvia mi preferencia, explicaré el por qué.
    Esta pregunta, de Lego o Rasti, ha sido una constante en la comunidad de simpatizantes del bloque para armar, cualquiera sea la preferencia por una marca.
    En lo personal, yo elegí Rasti siempre. ¿Por qué? Por una cuestión afectiva – mi juguete preferido de la infancia – y porque considero que a menor abanico de piezas – como menciona el autor de la nota – la cabeza trabaja más. Es muy fácil montar un modelo de calidad casi “maqueta” con Lego. Las piezas vienen perfectamente premoldeadas y específicas, y un manual exageradamente explicativo enseña como obtener un resultado muy agradable y realista a los ojos… Pero al ser Lego casi una maqueta para armar sin pegamento, creo que el resultado obtenido con Rasti es más meritorio, incluso aunque el modelo no sea tan perfecto, pero si muy trabajado y pensado, donde cada paso a dar, debe ser resuelto con imaginación y con las piezas que se tienen a la mano al carecer de “premoldeadas” y “especificas”. Este trabajo imaginativo y creativo es la esencia de juego con bloquecitos para armar.

  14. Como mamá de 3 varones puedo asegurarle que mis hijos jamás siguieron las instrucciones de los bloques, cualquiera fuese la marca elegida. Tal como Ud. indica, hasta han llegado a armar ruedas a partir del encastre de sucesivas piezas triangulares y precisamente eso es lo que los entretenía, el hecho de tener que ingeniárselas para armar nuevas cosas (incluso accesorios para los Playmobil). Para chicos despiertos, nada que venga guionado les resulta últil o interesante.

    1. Afortunadamente los chicos tienen defensas (y la felicito por los suyos, que parecen tenerlas muy activas). La buena educación debería consistir en aprovecharlas, no en doblegarlas como ocurre generalmente. Gracias por visitar este sitio.

  15. Siempre me pareció que el Lego, a pesar de ese aspecto acabado, era un jueguete tramposo por la cantidad de piezas especiales que traía según el modelo a armar. Y recuerdo vivamente ese “cambio de planes” que usted describe en la nota, al notar que algún objeto a medio armar me sugería la posibilidad de construir algo que no había pensado originalmente.

    En cuanto a los videojuegos, coincido en su apreciación general, aunque hay variadas excepciones a la regla. El oportunismo comercial para hacer juegos mediocres basados en películas u otros elementos existentes es casi tan viejo como los videojuegos (basta recordar el juego de ET para el Atari 2600 que prácticamente llevó la empresa a la ruina). Gracias a Dios siempre hay gente dispuesta a trabajar con dedicación y amor por lo que hace, aprovechando lo mejor de la tecnología vigente.

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