“No vuelven más! , no vuelven más!” cantó un entonces presidente argentino, sobre un escenario rodeado de aplaudientes partidarios, refiriéndose a quienes habían pasado a ser oposición. Así pontificaba, confiado en su triunfo electoral (estrecho) de no hacía mucho.
Y los aludidos.. volvieron.
Creo que el voto de -los que votaron- este domingo en Europa es, en su esencia, de exasperación por los que están, por la estafa que sienten que les están cometiendo. Un rechazo a que la nave europea siga en su curso actual.
De los ganadores de ayer depende que su triunfo no sea algo pasajero, tal como fue el gobierno de ese presidente argentino tan fugaz como arrogante. De su gestión tan idónea como decente, libre de engreimiento elitista, consustanciada con valores nacionales, lejos de sectas,.. de ello depende que aquéllos que el voto acaba de desalojar no vuelvan más.
Hacía mucho que no lo visitaba, Sr. Gaucho Malo. Qué gusto da leer a quienes llaman (¿a?) las cosas por su nombre. Gracias por compartir.
“No vuelven más! , no vuelven más!” cantó un entonces presidente argentino, sobre un escenario rodeado de aplaudientes partidarios, refiriéndose a quienes habían pasado a ser oposición. Así pontificaba, confiado en su triunfo electoral (estrecho) de no hacía mucho.
Y los aludidos.. volvieron.
Creo que el voto de -los que votaron- este domingo en Europa es, en su esencia, de exasperación por los que están, por la estafa que sienten que les están cometiendo. Un rechazo a que la nave europea siga en su curso actual.
De los ganadores de ayer depende que su triunfo no sea algo pasajero, tal como fue el gobierno de ese presidente argentino tan fugaz como arrogante. De su gestión tan idónea como decente, libre de engreimiento elitista, consustanciada con valores nacionales, lejos de sectas,.. de ello depende que aquéllos que el voto acaba de desalojar no vuelvan más.
Hacía mucho que no lo visitaba, Sr. Gaucho Malo. Qué gusto da leer a quienes llaman (¿a?) las cosas por su nombre. Gracias por compartir.