Macri no es un político brillante. No es un hombre brillante. Pero puede ser alguien bastante indicado para normalizar lo torcido y enredado de la anti-política de C. Fernández. Pero depende mucho de sus laderos; o, en todo caso, de las interacciones entre él y sus laderos.
Su análisis es un corte transversal – eso que algunos llaman una “foto” – muy esclarecido y, por eso mismo, inquietante. La provincia de Bs. As debería segmentarse. No hay en el mundo muchos casos parecidos: es un mundo completo y podría ser un país. Vidal, enfretándose a semejante monstruo, es poco creíble, pero es cierto: es una mujer dispuesta al autosacrificio. Merece más y mejor acompañamiento. Entiendo que Carrió – la “loca de la casa” – está muy cerca de ella y creo que eso es bueno para ambas.
Si somos capaces de salir de ésta, unos cuantos van a comenzar (recién) a darse cuenta de que no estuvimos en manos de una representante de la Política de la Liberación (Dussel) sino de una psicópata; una oportunista, como lo fue el marido, a la que se le pegaron todos los disfrases. Al respecto da pena leer a los periodistas y escritores de Página 12 que se han quedado enclaustrados en vientre de Cristina; en el vientre o en los intestinos, porque aquella situación no era muy diferente a una constipación. Pero aún tenemos que salir: estamos transitando el túnel en el que nos metió la…Autocracia Kleptocrática.
Para orientarnos mejor, Macri debería ser un poco más energico; pero para aparecer más claro en sus orientaciones y procedimientos tendría que limpiarse un poco la suela de sus zapatos…¿no?
Como siempre sus análisis aportan algo que no se encuentra en otros analistas. Es cierto que ha aumentado la incertidumbre. Pero continúa predominando el deseo de salir se esto y pasar a otra cosa.
No tengo dudas de la voluntad de cambio de amplios sectores de la sociedad argentina. Me intranquiliza que por momentos el gobierno pareciera no percibirla. ¿Qué necesidad tenía de juntar distintas iniciativas en un solo proyecto de ley “ómnibus”? Eso apesta a vieja política. Un propósito loable –que los jubilados cobren algo parecido a lo que deberían cobrar– mezclado con un blanqueo de capitales lleno de cláusulas sospechosas, algunas de las cuales fueron detectadas y frenadas por la oposición e incluso por Carrió. También es vieja política lo de Larreta en la ciudad: anuncio de ‘parque educativo’ para un mal disimulado negocio inmobiliario. Ya lo escribí en otro lugar: cuando uno piensa en las batallas que debe librar cotidianamente la gobernadora bonaerense, las maniobras del jefe de gobierno en la CABA dan vergüenza. Desde que asumió no ha hecho más que planear negocios raros y cosechar denuncias. Esto incomoda a la gente porque se trata de torpezas que generan desconfianza, la falta de confianza desalienta las inversiones, y sin inversiones este gobierno está frito. Las cosas que esta nota señala no son triviales. G
Macri no es un político brillante. No es un hombre brillante. Pero puede ser alguien bastante indicado para normalizar lo torcido y enredado de la anti-política de C. Fernández. Pero depende mucho de sus laderos; o, en todo caso, de las interacciones entre él y sus laderos.
Su análisis es un corte transversal – eso que algunos llaman una “foto” – muy esclarecido y, por eso mismo, inquietante. La provincia de Bs. As debería segmentarse. No hay en el mundo muchos casos parecidos: es un mundo completo y podría ser un país. Vidal, enfretándose a semejante monstruo, es poco creíble, pero es cierto: es una mujer dispuesta al autosacrificio. Merece más y mejor acompañamiento. Entiendo que Carrió – la “loca de la casa” – está muy cerca de ella y creo que eso es bueno para ambas.
Si somos capaces de salir de ésta, unos cuantos van a comenzar (recién) a darse cuenta de que no estuvimos en manos de una representante de la Política de la Liberación (Dussel) sino de una psicópata; una oportunista, como lo fue el marido, a la que se le pegaron todos los disfrases. Al respecto da pena leer a los periodistas y escritores de Página 12 que se han quedado enclaustrados en vientre de Cristina; en el vientre o en los intestinos, porque aquella situación no era muy diferente a una constipación. Pero aún tenemos que salir: estamos transitando el túnel en el que nos metió la…Autocracia Kleptocrática.
Para orientarnos mejor, Macri debería ser un poco más energico; pero para aparecer más claro en sus orientaciones y procedimientos tendría que limpiarse un poco la suela de sus zapatos…¿no?
Como siempre sus análisis aportan algo que no se encuentra en otros analistas. Es cierto que ha aumentado la incertidumbre. Pero continúa predominando el deseo de salir se esto y pasar a otra cosa.
No tengo dudas de la voluntad de cambio de amplios sectores de la sociedad argentina. Me intranquiliza que por momentos el gobierno pareciera no percibirla. ¿Qué necesidad tenía de juntar distintas iniciativas en un solo proyecto de ley “ómnibus”? Eso apesta a vieja política. Un propósito loable –que los jubilados cobren algo parecido a lo que deberían cobrar– mezclado con un blanqueo de capitales lleno de cláusulas sospechosas, algunas de las cuales fueron detectadas y frenadas por la oposición e incluso por Carrió. También es vieja política lo de Larreta en la ciudad: anuncio de ‘parque educativo’ para un mal disimulado negocio inmobiliario. Ya lo escribí en otro lugar: cuando uno piensa en las batallas que debe librar cotidianamente la gobernadora bonaerense, las maniobras del jefe de gobierno en la CABA dan vergüenza. Desde que asumió no ha hecho más que planear negocios raros y cosechar denuncias. Esto incomoda a la gente porque se trata de torpezas que generan desconfianza, la falta de confianza desalienta las inversiones, y sin inversiones este gobierno está frito. Las cosas que esta nota señala no son triviales. G